Sopa de cebolla con patatas
Para 2 ó 3 hambrientos.
Una CovidReceta para no desesperarse en la cocina. Sencilla y que te saca de apuros.
1º
2º
3º
- Si encuentras una cebolla hermosa mejor que mejor
- Córtala en juliana, cuanto más fina mejor. [cuidadito con filetearse las yemas de los dedos]
- Pocha la cebolla en aceite de oliva virgen. Con un pelín de sal para que sude.
- A fuego lento [no dejar que se dore] hasta que esté bien blandita.
- Con 4 patatas medianas haces el apaño.
- Córtalas en rodajas no muy finas para que no se deshagan al cocerlas.
4º
5º
6º
- En la cebolla pochada vierte las patatas y añade un poco más de sal.
- Da un par de vueltas durante 2 minutos para que no se peguen en el fondo y queden bien rehogadas [la fécula a veces hace estragos].
- Vierte aproximadamente 1,3 l de agua hirviendo.
- Añade ese colorcito amarillo típico en nuestras sopas con media cucharadita de café de cúrcuma.
- Yo hago todos mis platos con cayena en polvo [le hecho hasta al flan].
- Añade un par de hojitas de laurel.
- En 20 minutos la tienes lista. Controla que no se deshagan las patatas.
Voilà!
Unos CovidConsejos útiles:
- NO uses Tartrazina [E102 – el enemigo silencioso] como colorante.
- Se abusa de ella a saco en la industria de la alimentación y en nuestros sazonadores en sopas, paellas, etc.
- Controla que no viene como componente en la descripción del envase.
- La Tartrazina es un derivado del petróleo.
¡Confinados!
- Disfrutad de esta sencilla sopa, está dabuten.
- Suelo acompañarla con unas lonchas de queso junto a panes crujientes típicos de los países nórdicos «knöckebröd» [sueco] o «rye crisp bread» en inglés.
- Los podéis encontrar en los supermercados más conocidos.
¡A palo seco!
- ¡NO!
- Un buen vino siempre es saludable.
- En esta ocasión he echado mano de un ecológico Rueda.
- Me gusta en realidad el tinto.
- Para blanco, me saben a gloria los Riesling alemanes.
- Una buena cerveza también acompaña fenomenalmente.